La ratita presumida

Cuento de la Ratita Presumida

Cuento Clásico Infantil de la Ratita Presumida

Había una vez una ratita muy presumida que vivía en una pequeña casita en el campo. Le encantaba mantener su casa limpia y ordenada, y siempre estaba pendiente de su apariencia. Un día, mientras barría la entrada de su casa, encontró una moneda de oro en el suelo.

"¡Oh, qué suerte la mía!", exclamó la ratita, mientras recogía la moneda. "¿Qué podría comprar con esta moneda para hacerme aún más hermosa?"

Después de pensar un rato, decidió ir al mercado a comprar un lazo de seda para adornar su cola. Caminó hasta el mercado, y después de mirar todos los lazos disponibles, eligió uno de color rojo brillante.

Al día siguiente, la ratita se puso su lazo nuevo y salió a pasear por el pueblo. Se sentía muy contenta y segura de sí misma con su lazo rojo, y todos los animales del lugar la miraban al pasar.

No pasó mucho tiempo antes de que la ratita comenzara a recibir propuestas de matrimonio de varios animales. Primero, se acercó el gallo.

"Ratita, ratita, tan bonita y tan elegante," dijo el gallo, "¿te casarías conmigo?"

"Eso depende," respondió la ratita. "¿Cómo es tu voz?"

El gallo infló el pecho y cantó: "¡Quiquiriquí!"

La ratita se tapó las orejas y dijo: "¡Oh no, qué voz tan ruidosa! No, no me casaré contigo."

Luego se acercó el cerdo.

"Ratita, ratita, tan bonita y tan elegante," dijo el cerdo, "¿te casarías conmigo?"

"Eso depende," respondió la ratita. "¿Cómo es tu voz?"

El cerdo gruñó: "¡Oink, oink!"

La ratita se tapó la nariz y dijo: "¡Oh no, qué voz tan desagradable! No, no me casaré contigo."

Después llegó el perro.

"Ratita, ratita, tan bonita y tan elegante," dijo el perro, "¿te casarías conmigo?"

"Eso depende," respondió la ratita. "¿Cómo es tu voz?"

El perro ladró: "¡Guau, guau!"

La ratita negó con la cabeza y dijo: "¡Oh no, qué voz tan fuerte! No, no me casaré contigo."

Finalmente, se acercó el gato, con su suave pelaje y su elegante porte.

"Ratita, ratita, tan bonita y tan elegante," dijo el gato, "¿te casarías conmigo?"

"Eso depende," respondió la ratita. "¿Cómo es tu voz?"

El gato, con voz suave y melodiosa, dijo: "Miau, miau."

La ratita sonrió, complacida con la voz del gato, y aceptó casarse con él.

El gato invitó a la ratita a su casa para celebrar la boda. La ratita, emocionada, lo acompañó sin sospechar de sus verdaderas intenciones. Sin embargo, al llegar a la casa del gato, este mostró su verdadera naturaleza. Con un movimiento rápido, intentó atrapar a la ratita para comérsela.

La ratita, aunque sorprendida, era muy ágil y logró escapar de las garras del gato. Corrió tan rápido como pudo de vuelta a su casa, sin detenerse a mirar atrás.

Una vez a salvo en su casita, la ratita reflexionó sobre lo que había sucedido. Se dio cuenta de que había sido demasiado superficial al elegir a su pareja solo por la voz, sin considerar el verdadero carácter del gato.

Desde entonces, la ratita decidió ser más cautelosa y no dejarse llevar solo por las apariencias. Siguió siendo presumida, pero con un corazón más sabio, y vivió felizmente en su pequeña casa, recordando siempre la lección que había aprendido.

La Moraleja de La Ratita Presumida: La Apariencia No Lo Es Todo

La historia de "La Ratita Presumida" nos enseña que no debemos dejarnos llevar únicamente por las apariencias o por lo que parece atractivo a simple vista. Es crucial valorar el carácter y las intenciones verdaderas de quienes nos rodean antes de tomar decisiones importantes.

La ratita aprendió que la superficialidad puede llevar a situaciones peligrosas, y que la prudencia y la sabiduría son claves para vivir con seguridad y felicidad.

Quiz de Comprensión Lectora: La Ratita Presumida

1. ¿Qué encontró la ratita mientras barría la entrada de su casa?

2. ¿Qué decidió comprar la ratita con la moneda?

3. ¿Qué animal fue el primero en proponerle matrimonio a la ratita?

4. ¿Por qué la ratita rechazó al gallo?

5. ¿Qué animal logró que la ratita aceptara casarse con él?

6. ¿Qué hizo la ratita cuando descubrió las verdaderas intenciones del gato?

7. ¿Qué lección aprendió la ratita al final de la historia?

8. ¿Cómo decidió vivir la ratita después de su experiencia?

Comprensión Lectora: Ficha Descargable de la Ratita Presumida

Ficha de Preguntas del Cuento de la Ratita Presumida

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